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Cómo hacer de la vuelta al cole un proceso tranquilo. Consejos prácticos para familias, de la mano de Raúl Bermejo @thinksforkids

Consejos vuelta al cole tranquila

La vuelta al cole tranquila es posible con algunos consejos prácticos y una planificación adecuada. Esta etapa del año puede ser estresante para niños y padres, pero con consejos para una vuelta al cole organizada y apoyo emocional, la transición será más llevadera. A continuación, te presentamos estrategias útiles para lograr una vuelta al cole tranquila, desde la creación de rutinas hasta la preparación de materiales escolares, basados en los consejos del maestro Raúl Bermejo.

Consejos útiles no solo para la vuelta al cole, también para otros periodos vacacionales, inicio de la escuela infantil, cambios de colegio o cualquier otro cambio significativo en las rutinas.

Sigue leyendo y descubre los puntos imprescindibles para facilitar esta transición y asegurar un comienzo de curso escolar exitoso y sereno, basado en el respeto y el acompañamiento de las necesidades de tu peque.

Preparación previa, la clave para el éxito

Antes de que las clases comiencen, es esencial preparar tanto a los niños como al entorno en casa para asegurar una transición fluida hacia la rutina escolar.

  • Organiza el espacio: Un lugar cómodo, bien iluminado y libre de distracciones ayuda a que los niños se concentren y realicen sus tareas (si las hay) con más facilidad. Puedes incluir toques de colores suaves y aromas relajantes, como la lavanda, para fomentar un ambiente tranquilo.
  • Revisar el material escolar: Antes de que inicien las clases, haz un inventario de los útiles escolares y asegúrate de tener todo listo. Involucrar a tus hijos en la compra y organización de los materiales no solo aumenta su motivación, sino que les permite sentir mayor control y responsabilidad sobre su aprendizaje.
  • Planificar el horario familiar: Diseña un calendario familiar en el que todos los miembros puedan visualizar las actividades, compromisos y tiempo de descanso. Para los más pequeños, las tablas de rutinas con imágenes son muy útiles para que comprendan los tiempos y tareas diarias.

Adaptación gradual de los horarios

El ajuste de los horarios es uno de los aspectos más importantes para evitar unos primeros días caóticos. Una semana antes del inicio de las clases, comienza a ajustar paulatinamente la hora de dormir y despertar para que el cuerpo se acostumbre a la nueva rutina. Además, crear rutinas consistentes para la mañana y la noche es clave para que los niños sepan qué esperar y se sientan más seguros.

  • Rutinas matutinas: Incluir actividades sencillas como desayunar, vestirse y cepillarse los dientes en horarios concretos puede ayudar a que los niños empiecen el día con calma.
  • Rutinas nocturnas: Preparar la mochila y la ropa para el día siguiente, junto con una actividad relajante como leer un cuento y hablar de las emociones del día. , ayudará a que tus hijos se vayan a la cama tranquilos y duerman mejor.

Reforzar hábitos de estudio desde el principio

Para un año escolar fluido , es fundamental establecer buenos hábitos desde el primer día. Enseñarles a gestionar su tiempo y a organizarse les dará una base sólida para afrontar los desafíos académicos. Aunque algunos métodos pedagógicos no incluyan deberes formales, puedes integrar lo aprendido en el día a día mediante el juego o proyectos creativos.

Comunicación abierta y apoyo emocional

El regreso a la escuela puede despertar diversas emociones en los niños, desde entusiasmo hasta ansiedad. Fomentar un ambiente donde puedan expresar sus preocupaciones es clave para su bienestar emocional. La escucha activa y la empatía son esenciales para que los niños se sientan comprendidos y apoyados.

Además, involucrar a tus hijos en la planificación de su día a día les da una mayor sensación de control y responsabilidad. Permitir que participen en la elección de actividades extracurriculares o en la organización de sus horarios los motiva y les hace sentir que sus opiniones son valoradas.

¿Qué es la crianza respetuosa y cómo adaptarla al ámbito escolar?

La crianza respetuosa se basa en el respeto mutuo, la empatía y la comunicación abierta. Su objetivo es criar niños emocionalmente seguros, autónomos y con una autoestima saludable. Este enfoque puede adaptarse al ámbito escolar fomentando la cooperación, el respeto y la autonomía de los niños, adaptándose siempre a sus necesidades y a su momento evolutivo y madurativo.

En el ámbito escolar, la crianza respetuosa se puede aplicar a través de:

  • Empatía y comunicación abierta: Los maestros que escuchan activamente y validan las emociones de los niños contribuyen a un ambiente donde se sienten seguros para expresarse y aprender.
  • Promoción de la autonomía: Dar a los niños oportunidades para tomar decisiones sobre sus proyectos o actividades les ayuda a desarrollar un sentido de responsabilidad y control sobre su aprendizaje.
  • Resolución de conflictos sin castigos ni recompensas: En lugar de recurrir a castigos, la crianza respetuosa promueve el diálogo y la reflexión sobre las acciones para ayudar a los niños a aprender de sus errores y tomar mejores decisiones en el futuro.

Actividades extracurriculares para el equilibrio emocional

Inscribir a tus hijos en actividades extracurriculares que les gusten, como deportes, música o arte, no solo mejora su autoestima, sino que también les permite liberar estrés y equilibrar sus emociones. Mantenerlos activos y comprometidos en algo que disfruten puede hacer que la vuelta al cole sea más llevadera, pero recuerda que es importante que tengan tiempo y espacio para el juego libre que les permita relajarse e integrar todo lo aprendido.

Técnicas de relajación para el manejo del estrés

Es importante dotar a los niños de herramientas para manejar el estrés que pueden sentir con la carga de trabajo escolar. Algunas de las técnicas que puedes practicar en casa incluyen:

  • Mindfulness y meditación: Practicar ejercicios de respiración y relajación junto a tus hijos puede ayudar a reducir el estrés y mejorar la concentración. Estas técnicas no solo son beneficiosas para los niños, sino también para los padres, quienes pueden utilizarlas para crear un ambiente más calmado en casa.
  • Ejercicio físico regular: Incluir actividades físicas al aire libre, como caminar o jugar en el parque, ayuda a liberar energía y reducir la ansiedad. Además, el ejercicio contribuye a mejorar el estado de ánimo y refuerza el sistema inmunológico.
  • Diarios de gratitud: Fomentar el hábito de escribir o compartir en familia lo mejor del día ayuda a los niños a centrarse en lo positivo, desarrollando una mentalidad optimista y resiliente.

Metodologías educativas que apoyan el desarrollo integral

Existen diferentes metodologías educativas que pueden complementar la crianza respetuosa y adaptarse a las necesidades de cada niño:

  • Aprendizaje basado en proyectos (ABP): Los niños trabajan en proyectos que integran varias áreas del conocimiento. Fomenta la investigación, la creatividad y el trabajo en equipo, promoviendo el pensamiento crítico y la resolución de problemas.
  • Método Montessori: Enfatiza la independencia y el aprendizaje autodirigido a través de actividades prácticas. Los niños aprenden a su propio ritmo, lo que aumenta su motivación y su amor por el aprendizaje.
  • Flipped Classroom (Aula invertida): Los estudiantes revisan los materiales en casa y utilizan el tiempo de clase para realizar ejercicios prácticos y resolver dudas. Este enfoque permite un aprendizaje más personalizado.
  • Gamificación: El uso de elementos de juego en el aprendizaje puede motivar a los niños a comprometerse con los contenidos académicos de manera más divertida y efectiva.
  • Aprendizaje cooperativo: Los niños trabajan en grupos pequeños, lo que fomenta el trabajo en equipo y el desarrollo de habilidades sociales. Esta metodología también refuerza la comprensión del material a través del apoyo entre compañeros.
  • Método Waldorf: Enfatiza el aprendizaje a través de actividades artísticas, creativas y prácticas. Este enfoque holístico promueve el desarrollo emocional, social e intelectual del niño, respetando siempre las necesidades y la etapa evolutiva del niño.

Importancia de fomentar la creatividad, la psicomotricidad y la plasticidad

Fomentar la creatividad, la psicomotricidad y la plasticidad en los niños es crucial para su desarrollo integral. La creatividad estimula el pensamiento innovador y la resolución de problemas, mientras que la psicomotricidad mejora la coordinación y la percepción del cuerpo en el espacio. La plasticidad cerebral, por su parte, permite a los niños adaptarse a nuevos aprendizajes y experiencias.

  • Creatividad: Animar a los niños a explorar diferentes formas de expresión, como el arte, la música o el teatro, ayuda a desarrollar su capacidad para pensar fuera de lo convencional y abordar desafíos desde perspectivas originales.
  • Psicomotricidad: Actividades físicas y juegos que impliquen coordinación y movimientos complejos promueven el desarrollo motor y el equilibrio. Estos ejercicios también pueden ser integrados en las rutinas diarias para mantener a los niños activos y saludables.
  • Plasticidad cerebral: Exponer a los niños a nuevas experiencias y aprendizajes estimula el desarrollo cerebral, fomentando su capacidad para adaptarse a cambios y aprender habilidades nuevas.

Equilibrio entre estimulación y actividades sin llegar a saturar

Encontrar un equilibrio entre estimulación y tiempo libre es esencial para evitar la saturación y el agotamiento en los niños. Demasiada estimulación puede llevar al estrés y a la falta de disfrute en las actividades.

  • Estímulo adecuado: Ofrecer una variedad de actividades que desafíen a los niños sin sobrecargarlos ayuda a mantener su interés y entusiasmo. Es importante seleccionar actividades que sean apropiadas para su edad y que les permitan desarrollarse a su propio ritmo.
  • Tiempo libre: Asegúrate de que haya momentos de descanso y tiempo libre en el horario de los niños. El tiempo no estructurado es vital para que puedan relajarse, jugar libremente y recargar energías.

La vuelta al cole así como el inicio de nuevas etapas no tiene por qué ser estresante. Con una buena planificación, apoyo emocional y el uso de técnicas de relajación, puedes convertir este momento en una experiencia positiva tanto para ti como para tus hijos. Somos espejo, si estamos tranquilos, ellos lo abordarán mucho mejor.

Recuerda que cada niño es diferente y su adaptación puede variar, por lo que la paciencia y la empatía son tus mejores aliados en este proceso.

Además, integrar la crianza respetuosa, explorar metodologías educativas adecuadas, fomentar la creatividad y mantener un equilibrio entre estimulación y tiempo libre enriquecerá su desarrollo emocional y académico. ¡Disfruta de esta nueva aventura con tranquilidad y confianza!

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